7 habitos para ser más productivos

La productividad durante mucho tiempo ha estado ligada a la idea de realizar muchas cosas en poco tiempo. Digamos que es un concepto algo más profundo que todo esto.

La idea o necesidad de ser productivo, tanto en lo profesional como en lo personal, es el realizar aquello que consideras más importante, el máximo tiempo posible. Conociendo la intención es sacar un mayor rendimiento en tu horario profesional o cumplir con tu plan de vida.

1 - Centrarse en lo más importante. ¿Sabes qué es lo más importante? ¿Cómo repetir lo máximo posible lo más importante si no sabes lo que es lo más importante?. Imagínate hacer en tu puesto de trabajo de forma continuada tareas no importantes, que no tienen repercusión ni por sí solas ni en el objetivo principal. Lo que nos pasaría es que estaríamos muy lejos de este hábito y por consiguiente siendo poco productivos. En la vida personal pasa lo mismo. ¿Eres de los que hace muchas cosas todos los días, pero sientes que no haces nada? No eres el único. Y si lo deseas puedes trabajar en ello para darle una vuelta real a tu vida.

2- Diferenciar lo importante de lo urgente. Lo importante no tiene porqué ser urgente y estaría genial que empezaras a "trabajar" en lo importante antes de que sea urgente, de esta forma te evitarás que puedas llegar a un estado de "crisis". Trabajar lo importante en lo no urgente lleva implícita una exigencia personal, mientras que tratarlo cuando es urgente lleva el peso de la presión. Cambia exigencia por presión. Tu serás el que gane.

3- Planear. Cuesta muy poco. Sinceramente hazlo. Pruébalo. No empieces como loco a realizar acciones sin tarea. La pausa te dará productividad. Al iniciar la semana, el día, el mes. Coge un papel y un boli, o anota en el espacio de tu ordenador que tengas para ello. Qué vas a realizar y cuándo. Objetivos y todo aquello que vas a necesitar. Cada día puedo ver como muchos de nosotros tanto en el trabajo como en la vida personal caminamos sin rumbo definido, con una supuesta organización mental que acaba creando una mala planificación personal.

4- Saber encontrar lo que necesitas cuando lo necesitas. En pocas palabras organización. Organízate como veas, pero tu productividad aumentará considerablemente si tienes claro clarísimo dónde buscar aquello que necesitas en el momento oportuno.

5- Hacer las cosas que no queremos. ¿Te suena el concepto constancia? Hacer aquello que no deseamos hacer cuando toca hacerlo. Sí, soy consciente de que tienes una habilidad especial para argumentar por qué no hacer en el momento preciso esa tarea que no te apetece o no te gusta. En ese momento lo tienes claro, lo malo es las consecuencias. Esto es simple, ¿quieres ser productivo?, planifica cuando lo vas a hacer y simplemente hazlo.

6- Multitarea. El estilo de vida nos empuja y nos facilita la multitarea. Este concepto me gustaría que lo trataras con cautela. Soy un gran defensor de focalizar tu atención en lo que haces, y si además, te beneficias de las facilidades que hoy en día nos aporta la tecnología para realizar determinadas tareas pues mucho mejor. Sacar rendimiento a tu tiempo con la multitarea. Empieza primero en pensar qué vas a utilizar, cómo lo vas a hacer y pregúntate en qué medida te puede distraer de tu foco principal. Si la respuesta no te gusta, no desistas, busca soluciones.

7- Trabaja estratégicamente. La estrategia es necesaria en cualquier aspecto de la vida. Usaste una estrategia para enamorar a tu marido o mujer, para cuidar a tus hijos, para conseguir algo de tus padres, para aprobar un examen en el instituto o en la universidad. Pero hay una gran diferencia entre usar una estrategia y trabajar la estrategia. Trabajar la estrategia requiere de tiempo (vuelvo a poner en alza la pausa), de plantearse preguntas (¿para qué?, ¿cómo?, ¿qué dificultades...? ¿qué recursos..?,...). De lo gran estratega que seas dependerá en parte tus probabilidades de éxito.

Si tratamos estos siete hábitos de golpe puede parecer mucho, y si los vamos integrando de forma paulatina podremos comprobar como exprimimos el tiempo a nuestro favor, sin que suponga un esfuerzo desmesurado.

Tal como he ido comentando se trata de trabajar estratégicamente, apoyándote en un plan de acción y beneficiandote de la multitarea controlada, para centrarnos en lo más importante, sin dejar de hacer lo que no nos gusta y hacerlo en un momento de no urgencia, evitando así llegar a un estado de crisis urgente-importante.

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