Todo empieza por un primer paso
Un primer paso. Esto es lo que necesitas. Seguramente en más de una ocasión te has planteado objetivos que alcanzar, porque algún sueño se ha colado en tu cabeza y revoloteado hasta considerar que sería maravilloso marcarlo como una meta. No obstante, con frecuencia ocurre que ni siquiera le damos la oportunidad de brotar, de crear el espacio para que surja como tal y, es que si tenemos en cuenta el ritmo de la sociedad en la que habitamos, es de lo más normal. Lo que no es lógico ni normal es que caminemos a toda pastilla, sin freno y con el piloto automático, ése que no nos deja desviarnos del camino para explorar o realizar lo que realmente nos importa.
Y lo verdaderamente mágico es cuando se nos enciende una bombillita en la cabeza que nos plantea cumplir con algo que deseamos de verdad. Por un instante nos ilusionamos, soñamos con ello y con el hecho de cómo sería nuestra vida si lo llegáramos a alcanzar. Es en este punto donde solemos realizar dos acciones; abandonamos la idea, diciéndonos a nosotros mismos que seamos"realistas" y que ahora quizás no estemos para esas cosas, o simplemente que no podemos hacerlo. En este último caso es posible tengamos un saboteador interno que nos impida salir de nuestra zona de confort. La segunda de nuestras favoritas posibilidades, es la de empezar a planificar. Listados, fechas, cómo sería, qué necesito, etc. Y en este caso me veo obligado a citar a Dwight D. Eisenhower cuando afirmaba que "Los planes son inservibles, pero planificar es imprescindible".
Planificar es realmente imprescindible, crear un plan de acción, la fijación de unos objetivos, cómo medirlos, asentarlo en el tiempo... Conforman un conjunto de actividades esencial para facilitarnos la continuidad, la mejora, el éxito en un proyecto, idea, meta u objetivo. Si bien también es cierto que no podemos quedarnos en la planificación eterna, ya que en esa lista de tareas uno de los puntos clave es el de dar el primer paso. Y, aunque en ocasiones bien es cierto que no tenemos dibujado todo el plan ni sabemos qué va a pasar en un futuro inmediato, es verdad que tampoco necesitamos conocer todo el proceso o camino de antemano porque nos basta con conocer los primeros pasos, los cuales nos llevaran a los segundos, así como estos posiblemente nos conducirán a la elección de nuevos caminos.
Haciendo uso de una metáfora, un recurso muy utilizado en coaching, esos primeros pasos son como los faros de nuestro coche. Tú sabes que estos faros en un viaje nocturno no puede iluminar los setecientos kilómetros de tu viaje, pero te dan la suficiente seguridad para ver los próximos cincuenta metros y de esta forma seguir avanzando hacia el lugar donde tú quieres llegar.
¿Cuál es el siguiente paso que vas a dar para estar más cerca de aquello que quieres?
